jueves, 10 de mayo de 2018

Respira Vida



Vivimos bajo asedio del aire que respiramos. Desde el momento en que nacemos, el coctel contaminante que nos rodea, el cual combina carbón negro, ozono a nivel del suelo y metano, va lentamente atacando nuestro sistema inmune, el cual se defiende día a día; un gran número de seres humanos pierden ese pulso, y mueren de enfermedades causadas por la polución. No solo eso, la flora y fauna de nuestro planeta están perdiendo esa misma batalla. 

No necesito ser científica ni experta para decir esto. He crecido viendo cómo el planeta 
Imagen: The Roaming Platypus - Unsplash.
cambia, conociendo a la extinción de muchas especies animales y vegetales, el incremento de enfermedades como el asma y problemas crónicos como las alergias; conozco a más gente con enfermedades respiratorias crónicas que cualquier otra enfermedad. Tanto nuestro planeta como nosotros mismos estamos bajo el ataque de la polución creada por los mismos mecanismos en los que confiamos para darnos comida, productos básicos, comodidades y todo lo eso que pensamos que necesitamos en la vida. 

Y por eso se ha lanzado el desafío Respira Vida. Breathe Life es una campaña conjunta de la Organización Mundial de la Salud, el Programa para el Medio Ambiente de la ONU y la Coalición Clima y Aire Limpio, en la que han lanzado un reto a todo el planeta. 

Nos desafían a dejar el coche, y a caminar, ir en bici, o usar transporte público 26 millas (o 46 kilómetros) durante el mes de mayo. Caminar, ir en bici o en transporte público la distancia equivalente a una maratón; o sea, una carrera por un aire más limpio, y por la vida. L idea es concienciarnos sobre la necesidad global de tener un aire más limpio para respirar, y recordar a la gente que hay otros modos de transportarse en el día a día. 

¿Qué harás? 
Lo más sencillo es intentar no ir al trabajo en coche, aunque entiendo que para muchos eso puede ser difícil. Te llevará 3 minutos mirar en Google cómo llegar desde tu casa al trabajo en coche y compararlo con el mismo trayecto en transporte público. De ser factible, ¿por qué no dejas el coche en casa una semana y vas así? Al no tener que conducir 
Imagen: Graeme Worsfold - Unsplash.
incrementarás tu tiempo libre mental: puedes aprovechar para leer un libro, escuchar un libro por audio, leer el periódico o sencillamente mirar por la ventana. Se puede aprender mucho sobre una ciudad con solo mirar desde el autobús, tranvía, o tren. 

Cambiar de ruedas 
Si el trasporte público tarda demasiado, considera ir en bici. Esa misma función de búsqueda de direcciones de Google te muestra cuánto tardarías en hacer la ruta en bici. Y si no tienes bicicleta, casi todas las ciudades hoy en día tienen servicio de alquiler público. Como último recurso están la familia, amigos y vecinos. ¿Quién sabe? A lo mejor le coges el gustillo a la bici y te compras una propia. 

O caminar 
Sé muy bien que muchas personas no tienen la opción de ir caminando al trabajo. Eso no significa que no puedes aparcar el coche y caminar para hacer otras cosas, como, por ejemplo: 
  • Ir a la tienda más cercana a realizar pequeñas compras 
  • Pedir comida para llevar, en vez de que te la traigan a casa 
  • Mirar en línea en tu zona y localizar un café, una biblioteca, una tienda de tu hobby preferido o un museo, e ir allí caminando. Es algo que hacer y estarás apoyando tu economía local. 
  • Ir caminando a algún sitio donde tienes que ir, cuando sabes que llegar caminando te llevará 20 minutos o menos. 
Por la salud del planeta, y la tuya
Al fin y al cabo, ten en cuenta que le estarás haciendo un favor a tu cuerpo al elegir caminar o ir en bici. La vida de hoy es demasiado sedentaria, los médicos no dejan de decir siempre que hay que acelerar el ritmo cardiaco 30 minutos al día. Pues eso: caminar, ir en bici, o sencillamente ir caminando al transporte público para llegar al trabajo, en vez de ir de puerta a puerta en el coche te ayudará a estar más sana/o. 

Si no queda otra 
Si eres de los/las que necesita sí o sí el coche para ir a trabajar… ¿te has planteado no ir a solas? A estas alturas todas las ciudades en los EEUU y muchas, pero muchas urbes por 
Imagen: Roxanne Desgagnes - Unsplash.
todo el planeta tienen páginas web, apps y foros en línea para ayudar a conectar gente que busca compartir los gastos de gasolina a la oficina o lugar de trabajo. Si tu zona no tiene, puedes entrar en el foro de tu vecindario o ciudad en Facebook y preguntar si habría gente interesada en crear un sistema de intercambio de viajes. 

Si compartes el camino al trabajo con otros ahorras en gasolina, a veces en peajes, ayudas al planeta -por cada persona que comparte auto, hay un auto menos contaminando o una fracción menor de impacto contaminante en el sistema de transporte público-, conoces a gente nueva, llegas al trabajo a tiempo y, a veces, incluso más rápido (si tu ruta tiene carriles que benefician a autos con un número alto de ocupantes). 

Un problema global cuyas soluciones empiezan a nivel local 
Solo hay una manera de dejar de contaminar, y el cambio debe empezar a nivel individual. Pregúntate esto: ¿hay algo en tu vida que sabes que contribuye a la polución, a un daño medioambiental, que podrías cambiar, pero hasta la fecha no te animas a cambiarlo? Si la respuesta es sí, este mes es un buen momento para ir hacerlo. Cuando haya suficientes personas que se planteen cambiar el modo en que nos relacionamos con el planeta, será cuando las cosas empiecen a cambiar para bien. Como dice Richard Branson, no tenemos una Planeta B. Es nuestro hogar y ya es hora de limpiar la casa. 

Si te gusta este desafío y quieres hacer otros cambios positivos para con el medio ambiente y el planeta, aquí encontrarás inspiración

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