jueves, 10 de julio de 2014

Los Adolescentes y el Dinero: Ahorrar, Parte 1



En el último artículo hablaba de distintas maneras de enseñar a niños y adolescentes cómo apreciar el valor del dinero usando su paga.

Hoy vamos a hablar de enseñar a los adolescentes a ahorrar.

No es fácil conectarse con ellos. En cuestiones de tecnología están a años luz, y se puede decir lo mismo casi siempre en cuestiones de cultura moderna, moda y tendencias. Intenta contarles de algo nuevo que has visto en Youtube y ¿qué hacen? Te dan esta mirada que te dice “no si ya, eso es del mes pasado ¿en serio te pensabas que era nuevo?” todo en tres segundos.

Eso sí, si tú crees que tu hijo o hija es más abierto, siempre puedes recurrir a uso de un software o app que le enseñe a ahorrar; de ser así, recomiendo Three Jars, diseñado para chavales de 5 a 13 años de edad.

Hablemos de sistemas menos tecnológicos para enseñarles a ahorrar.




Ropa Vintage 

(y esto no va a funcionar con chicos, generalmente)


Hoy en día la frugalidad está de moda. Por supuesto es depende de las tendencias de tu hija adolescente. Si es fashionista, va a ser que la ropa vintage adquirible en tiendas de segunda mano no sea lo suyo, por lo menos hasta que la ropa de este tipo esté de moda.


Pero si tu hija es de espíritu individualista e inquisitivo, o quizás hasta una pequeña diosa de la moda, puedes llevártela un día de compras a una tienda de segunda mano. Dile que no tiene que comprar nada pero que la quieres llevar porque siempre es curioso ver lo que la gente quiere vender. A veces se pueden encontrar auténticos tesoros en estas tiendas: hay vestidos vintage de ciertas marcas que hoy en día ya no existen y por los que los compradores expertos pagan por encima de los 2,000 dólares.

Puede que tu hija empiece caminando entre los pasillos de lado para que nada le toque pero tarde o temprano le picará el gusanillo de la curiosidad. No le muestres nada, deja que descubra ella lo que le interesa. Si te trae algo para que lo veas, con eso sabrás que puedes traerla de vuelta.



En el supermercado


Pídeles ayuda a tus hijos para escoger los productos de mejor precio. Explícales que el menor precio de venta no es necesariamente el mejor, y cómo prestar atención al precio por unidad/libra/galón. Así aprenden que comprar algo pequeño porque el precio es menor no indica que sea más barato a la larga si es algo que se consume regularmente.



Rebajas y cupones


Apúntate a las páginas web de las tiendas donde compran tus adolescentes, ya sean de ropa, juegos, deportes o maquillaje. De este modo estarás al tanto de cuándo tienen rebajas y ofertas, puedes pasarles el dato a tus hijos; o enviarles cupones para imprimir y que se ahorren dinero en lo que les gusta. Asimismo, mándales por email cualquier enlace sobre rebajas en tiendas en línea.

También les puedes explicar que pueden ahorrar en muchas cosas que compran a menudo: maquillaje, ropa, equipo de deportes, zapatos e incluso mp3, teléfonos, etcétera, usando páginas de descuento como Coupon Mountain (una página impresionante donde puedes encontrar cupones escribiendo el nombre de la tienda), Current Codes (códigos de descuento donde puedes buscar por categoría o tienda), Wow-Coupons, BeCentsAble, Coupons.com y otros.




Para gastos más grandes: el método de investigación y el de contribución


¿Que necesitan un iPad Nuevo, un Smartphone, un game? Haz que investiguen en línea, que encuentren la mejor combinación de calidad y precio para lo que quieren. Recuérdales que si encuentran una venta por internet, deben incluir los gastos de envío en el precio.

Que te muestren sus tres elecciones preferidas y te expliquen por qué las han elegido. Hablad de cuanto estas dispuesto/a a pagar y acordad cual comprar.

Pero ten en cuenta que si accedes a pagar el precio completo, lo más probable es que te muestren los tres súper-mejores modelos, y los más caros. Si quieres evitar eso, hay otro modo de enseñarles a ahorrar. No pagues por todo.

Dependiendo del tipo de paga que les des a tus hijos, puedes crear un plan de contribuciones, como hacen las empresas. Dile a tu hijo o hija que pagarás el 50% de su compra y ellos tendrán que contribuir el resto (siempre que estemos hablando de compras que no sean necesarias para el colegio o actividades extracurriculares), o que paguen un porcentaje de tu elección. Así aprenden a usar su dinero-y el tuyo-, ya que cuando tienen que invertir ellos mismos en la compra van a tener que escoger cuanto quieren y pueden permitirse.


Lee la segunda parte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario